Acto de Humildad Hacia Dios

Jesús, mi Señor,
confieso que soy un pecador.

Pero en Tu bondad
me has invitado a acercarme a Tu Santa Mesa
y a participar en Tu banquete celestial.

Confiando en Tu misericordia, vengo a Ti
con confianza y con un corazón humilde y contrito.

Señor, no soy digno de que entres
en mi casa, pero di una palabra,
y mi alma quedará sana.

Ven a mí, Jesús, ven a mí,
y guárdame en Tu amor
y en Tu gracia para siempre.


Amén.