El Buen Pastor

Pastor fiel, no eres un trabajador
que huye a la vista del peligro,
pero Tu fidelidad fue tentada y probada
en el madero de la Cruz.

Acepta el regalo de nuestra gratitud
por Tu cuidado maravilloso.
Ayúdanos a escuchar y seguir Tu voz.

Pastor vigilante, que proteges al rebaño
y buscas incansablemente a los que
se alejan del redil,
recuperas a los perdidos y los traes a casa.

Atiende y sana sus heridas.

Buen Pastor, que da Su Vida
por Sus ovejas, alimenta a Tu pueblo
con el Pan de Vida, para que podamos reflejar

Tu semejanza y gozar del manantial del Agua Viva
que nunca termina.


Amén.