Guíanos con Entusiasmo

Padre Alberto Hurtado, Apóstol de Jesucristo,
Siervo de los pobres, amigo de los niños, maestro de la juventud,
alabamos a Dios por tu paso entre nosotros.

Sabías como amar y servir.
Fuiste profeta de la justicia y refugio para el más necesitado.

Con amor, construiste una casa para recibir a Cristo.

Como un verdadero padre, nos llamas a vivir un compromiso,
fe consistente, en solidaridad.

Nos guías con entusiasmo.

Nos diriges al Salvador que nuestro mundo necesita.

Ayúdanos a vivir contentos en medio de las dificultades.

Ayúdanos a dedicar nuestra vida a nuestros hermanos y hermanas.

Padre Hurtado, hijo de María y de la Iglesia,
amigo de Dios, ruega por todos nosotros.


Amén.