Madre de Misericordia

Oh María amorosa, Madre de Misericordia
y refugio de pecadores,
atraído por tu belleza y dulzura,
como también por tu tierna compasión,
me dirijo confiadamente a ti, indigno como soy
y te pido que me obtengas
de tu amado Hijo mi intención.

Sobre todo, te ruego
mi Madre y protectora,
me recibas entre el número
de tus hijos devotos, y me guíes
desde tu alto trono de gloria.


Amén.