Oh Jesús, Vuelve

Oh Jesús, vuelve a nuestra sociedad,
a nuestra vida familiar, a nuestras almas
y reina allí como nuestro soberano de paz.
Ilumina con el esplendor de la fe
y la caridad de Tu tierno corazón
las almas de aquellos que trabajan por el bien
del pueblo y de Tus pobres.
Imparte en ellos Tu propio espíritu,
un espíritu de disciplina, orden y dulzura,
preservando la llama del entusiasmo
siempre encendida en sus corazones.

Que llegue muy pronto el día,
cuando Te veamos restaurado
en el centro de la vida cívica,
nacido sobre los hombros de Tu pueblo alegre.


Amén.