Oh San Jorge,
siervo fiel de Dios y mártir invencible,
favorecido de Dios con el don de la fe,
e inflamado con un amor ardiente a Cristo,
luchaste valientemente en contra del dragón
del orgullo, la falsedad, y el engaño.
Ni el dolor ni la tortura, ni la espada ni la muerte
pudieron apartarte del amor de Cristo.
Fervientemente te imploro
por el bien de este amor
ayudarme por tu intercesión
a vencer las tentaciones que me rodean,
y a soportar con valor las pruebas que me oprimen,
para que pueda pacientemente llevar la cruz
que ha sido impuesta sobre mí,
y no permitir que ni la angustia ni las dificultades
me separen del amor de nuestro Señor Jesucristo.
Valiente campeón de la Fe,
asísteme en el combate en contra del mal,
para que pueda ganar la promesa prometida a aquellos
que perseveren hasta el fin.
Amén.
siervo fiel de Dios y mártir invencible,
favorecido de Dios con el don de la fe,
e inflamado con un amor ardiente a Cristo,
luchaste valientemente en contra del dragón
del orgullo, la falsedad, y el engaño.
Ni el dolor ni la tortura, ni la espada ni la muerte
pudieron apartarte del amor de Cristo.
Fervientemente te imploro
por el bien de este amor
ayudarme por tu intercesión
a vencer las tentaciones que me rodean,
y a soportar con valor las pruebas que me oprimen,
para que pueda pacientemente llevar la cruz
que ha sido impuesta sobre mí,
y no permitir que ni la angustia ni las dificultades
me separen del amor de nuestro Señor Jesucristo.
Valiente campeón de la Fe,
asísteme en el combate en contra del mal,
para que pueda ganar la promesa prometida a aquellos
que perseveren hasta el fin.
Amén.
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