Una oración para los abuelos

Querida Santa Ana,
fuiste doblemente bendecida al tener
a Maria santísima como tu hija,
y a Jesús, nuestro Salvador, como tu nieto.
Sé que cada periodo de nuestra vida
tiene responsabilidades y alegrías.

Hoy, parece que los abuelos
son echados a un lado a hacer nada
o llamados a hacerlo todo.
Ayúdame a saber dónde están mis deberes
y a llevarlos a cabo de la mejor manera posible.

Cuida de mi familia,
mis hijos y sus hijos.
Inspíralos a seguir a tu nieto
y vivir vidas verdaderamente cristianas.

Mantennos bajo tu cuidado amoroso,
no permitas que nos alejemos de Jesús,
y ayúdanos a recibir la alegría
de entrar en la presencia
gloriosa de tu nieto por siempre.

Santa Ana, ora por nosotros, los abuelos.

Amen.