Sacrificio a Dios

Oh grandiosa Santa Juana Francisca
quien, para seguir las inspiraciones del Espíritu Santo,
cuando fuiste llamada al estado religioso,
despreciaste todas las ataduras de la naturaleza y la sangre;

Obtennos la gracia de corresponder fielmente
con todos los impulsos divinos, y el sacrificio a Dios
lo que sea más querido y precioso para nosotros,
para que podamos gozar de la vida eterna en el cielo.


Amén.